HERMOSA POR DENTRO Y POR FUERA

HERMOSA POR DENTRO La palabra DENTRO denota, la PARTE INTERIOR de un espacio o termino real o imaginario, Ejemplo: dentro de mi alma, dentro de la casa etc. Y cuando hablamos de INTERIOR hablamos de: central, secreto, interno, profundo, recóndito. Podemos también mencionar la palabra derivada de INTERIOR que es INTERIORIDAD que significa también Intimidad, alma, interior, entrañas, Hablar de belleza interior para mí representa un tema muy profundo y la vez excitante, por lo cual dividiré este capítulo en cuatro partes. 1. Ríos de agua viva. 2. Moldeada por el Alfarero. 3. Purificada con fuego. 4. Árbol de preciosos frutos. 1. RIOS DE AGUA VIVA El Señor Jesús dijo: Que el que creía en El como dice en la escritura de su interior correrían ríos de agua viva, y al mencionar los “ríos de agua viva”, se estaba refiriendo al Espíritu Santo, pero, El utilizo esta expresión en otra ocasión para referirse a la vida eterna, cuando le dijo a la mujer Samaritana “Si conocieras el don de Dios, y quien El que te dice: dame de beber; tú le pedirías y El te daría agua viva”. El Espíritu Santo y la vida eterna van juntos de la mano por que, por que cuando aceptamos el regalo maravilloso del espíritu santo, el consolador que prometió dejarnos antes de ascender al cielo, estamos aceptando su presencia dentro de nuestras vidas, y entonces nos trae vida eterna. El Espíritu Santo es Dios mismo morando dentro de nosotros, y eso es algo GLORIOSO. Algo más, es el motor que nos va a llevar al cielo. Jesús prometió la venida del Espíritu Santo, dijo que si le amábamos guardáramos sus mandamientos, y El nos daría al consolador para que estuviera con nosotros para siempre. Jesús prometió dejarnos el consolador, el Espíritu Santo, El mismo morando dentro de nosotros. Y les dijo: Todavía un poco, y el mundo no me vera mas; pero vosotros me veréis; porque vivo, vosotros también viviréis. Nuestro Dios sabia que los discípulos necesitarían de ese poder para fortalecer sus vidas y ser sus testigos, no importando las duras pruebas que tuvieran que atravesar. Ahora, nosotras, las que le hemos aceptado como Señor y Salvador de nuestras vidas tenemos al alcance ese mismo poder, transformador, regenerador, único, ES UN REGALO MARAVILLOSO, Y esta tu disposición, si no lo has hecho tuyo, ¡ahora es el momento! ¡DEJA FLUIR ESOS RIOS DE AGUA VIVA EN TI! ¿Cómo? Llenándote completamente del Espíritu Santo de Dios, ¿quieres poder y autoridad para enfrentar y vencer los problemas, las adversidades, los ataques del maligno, anhelas tener más sabiduría para guiar tu vida y la de tu familia, servir a Dios grandemente, ser bendición para otros, prepararte eficazmente para ir al cielo al encuentro con El un día? Llenarte del poder de Dios es la respuesta, porque ese poder transformara tu vida, te regenerara, de tal manera que de la “vieja mujer” no quedaran sino los recuerdos, y esos solo se utilizaran para testificar su obra maravillosa en ti. Quiero decirte algo mas, no subestimes ese poder, recuerda que el Señor Jesús dijo: “Pero recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo”. Anhélalo cada día, búscalo, úsalo, déjalo fluir, DEJA CORRER ESOS RIOS DE AGUA VIVA EN TI. Porque HERMOSEARAN TU VIDA POR DENTRO, quiero decir, tus pensamientos, emociones, decisiones, intenciones, y acciones serán perfectamente dirigidas por aquel que mora en ti DIOS MISMO. Hay un grupo de mujeres de oración, en la iglesia donde me he congregado por más de 10 anos, es un grupo no muy grande, yo lo describo como un “remanente”, que a pesar de todo lo que viene a sus vidas, problemas, tristezas, desilusiones, afanes, criticas, cansancio, etc. Ha sido fiel, no se ha secado. Muy seguido, están buscando el rostro del Señor en oración, en ayuno, en vigilia. Son mujeres que anhelan la presencia de Dios, y es maravilloso ver como El ha ido transformando sus vidas. Algunas han recibido dones espirituales, otras, poder y autoridad para ministrar las necesidades, otras, sabiduría para guiar su familia, otras, han sido liberadas de sus cargas y han aprendido a dejarlas