PRÓLOGO
En Medítalo, el Pastor Juan Carlos ha hecho una aportación positiva respecto a los temas de Liderazgo, Fe, Carácter, Sometimiento, Etc. Detrás de este libro, veo a un autor Cristo-Céntrico que nos desafía a ser líderes trascendentales. Más allá de hablar del Carisma que necesita un líder, nos habla de la necesidad de Carácter.
Con singular autoridad, el autor declara: “Cuando la Flexibilidad se convierte en nuestra principal Cualidad y la Tolerancia nuestra principal Virtud; es cuando sabemos que necesitamos volver a comenzar en el lugar donde dejamos de ser quienes solíamos ser”.
Con la Integridad que le caracteriza y con una mentalidad que no admite complicidad con la mediocridad, el Pastor Juan Carlos nos dicta pautas respecto a la Fe, el Sentido de Identidad, la Auto-Disciplina y los Valores Éticos que debe poseer un líder para poder realizar su asignación con Excelencia.
En vez de utilizar frases trilladas e idealistas, nos entrega principios prácticos que pueden ser aplicados tanto en la esfera eclesial como en el ambiente empresarial. Medítalo, no es un libro regular, es una colección de reflexiones sapienciales que nos motivan a replantearnos muchos de nuestros axiomas. Más aun, es un agente catalizador que nos guiara a reflexionar sobre nuestros estilos, la verdadera espiritualidad y la filosofía de liderazgo.
Además, Medítalo, nos reta a descubrir nuestra verdadera identidad y a crecer en el Temor a Dios. Como si eso fuera poco, nos trae Revelación sobre la Verdadera Adoración y nos guía a entender, lo que el autor ha denominado: “La Soberanía del Amor”. En estos tiempos cuando se evidencia un raro sincretismo entre los principios espirituales y los conceptos del humanismo secular; momentos cuando existen muchas voces que emiten sonidos inciertos y que promueven la auto dependencia y la indisciplina.
El Pastor Juan Carlos se levanta como una voz certera que, con principios bíblicos y bagaje experimental, nos dice meridianamente claro, que el secreto de una vida espiritual productiva y victoriosa no se encuentra en los atajos de fabricación humana, sino en el Camino de la Fe.
Adentrándonos en este extraordinario libro, leemos: “Somos llamados a cosas mayores que solo pueden ser alcanzadas por medio de la verdadera Fe. Qué bueno es saber que no depende de si nuestro día amanece gris o nublado, sino de que, por encima de las nubes, el Sol seguirá brillando y Dios estará siempre en control como el Padre que siempre cuida de sus hijos”.
El Pastor Juan Carlos es una voz que nos recuerda que, sin estar primero en las manos del Alfarero, nuestras ejecutorias humanas carecerán de autoridad espiritual. Al respecto, expresa: “El barro necesita del agua (Espíritu) para ablandarse y tomar la forma necesaria. Así nosotros también necesitamos del Agua y del Aceite para ser ablandados y formados como Instrumentos Útiles. Rechazar el proceso por Temor al rompimiento, es rechazar la Voluntad de quien quiere perfeccionarnos para su servicio”.
Este libro, sin duda rompe con los estereotipos religiosos pues posee una carga gloriosa de Revelación. Recomiendo este libro favorablemente y aconsejo la adquisición de múltiples copias, pues si lo prestas, puede que no te lo devuelvan.
Dr. Víctor Centeno, Th.D
Autor de los libros: A Frasetazo Limpio y Liderazgo y Liberación del Temor
INTRODUCCIÓN
“…hombres muy eficaces en la obra del ministerio en la casa de Dios”
1 CRÓNICAS 9.13b
Muchos hablan hoy de ministerio, anhelan ministerio, se preparan para el ministerio. El ministerio es servicio, simple y llanamente servicio de obediencia, en la función donde hemos sido llamados a servir. No ministramos a los hombres, ministramos a Dios. De esta forma los hombres son bendecidos cuando realizamos un buen servicio a Dios. Servir a los hombres para agradar a Dios, seria intentar por medio de las obras, alcanzar un propósito divino, lo que sabemos es contrario a lo que Dios estableció.
Muchos pierden el enfoque del ministerio cuando se institucionaliza y se formaliza el Servicio. Aunque el proceso es ordenado y constante, no puede ser influenciado de ninguna forma por la opinión humana. Dios es Majestuoso, es quien Ostenta toda autoridad, en el cielo, la tierra y debajo de la tierra. Su hijo Jesucristo, tiene todos los méritos y es quien nos hizo saber la voluntad de su Padre por medio de la obediencia, su muerte y su resurrección.
El Espíritu Santo con el cual hemos sido sellados, nos Dirige y nos Instruye en cómo debemos servir, hasta donde y a quienes. Como cuerpo tenemos funciones específicas, servimos de distintas formas y tenemos distintas necesidades.
Sirviendo a los demás, servimos a Dios. De esta forma también somos bendecidos cuando otros en el mismo espíritu sirven a Dios.
Dentro de los distintos niveles de Servicio y Autoridad, tenemos distintas oportunidades de alcanzar e impactar la vida de otros. Uno de los elementos más importantes en este nivel de servicio lo es la Experiencia y la Perspectiva. La rendición al proceso, nos permite afinar nuestro Discernimiento y operar más saludable y efectivamente.
En resumen, cada reflexión aquí plasmada es el resultado de una experiencia personal, de una ministración directa del Espíritu de Dios o una situación en la que se nos permitió trabajar a favor del pueblo de Dios.
Lo más importante es que todo se haga para la gloria de Dios, para el alcance de los no creyentes y para la edificación del Cuerpo de Cristo.
Esperamos que sean bendecidos, Pastor Juan Carlos